Hilos tensores

Transforma tu rostro con un procedimiento no quirúrgico que levanta y tensa la piel de manera segura y efectiva. Recupera la juventud y la firmeza de tu piel con los hilos tensores.

Dr. Laura Bermejo

Médico Cirujana Maxilofacial, experta en cirugía estética facial y medicina estética

En los últimos años, los hilos tensores faciales se han consolidado como una de las técnicas más solicitadas en medicina estética para combatir la flacidez y redefinir los contornos faciales sin necesidad de pasar por quirófano. Esta técnica mínimamente invasiva ofrece resultados inmediatos, seguros y progresivos, con una recuperación rápida y sin cicatrices.

En la clínica de la Dra. Laura Bermejo, los tratamientos con hilos tensores se realizan con una rigurosa valoración previa y con materiales totalmente biocompatibles, adaptados a las necesidades anatómicas de cada paciente.

¿Qué son los hilos tensores?

Los hilos tensores son suturas reabsorbibles compuestas por materiales biocompatibles como el ácido poliláctico (PLA) o la polidioxanona (PDO). Se introducen en las capas profundas de la piel mediante agujas o cánulas especiales, sin necesidad de incisiones quirúrgicas.

Su doble efecto los convierte en una herramienta muy eficaz:

  1. Efecto mecánico inmediato: el hilo actúa como un soporte que tensa los tejidos en el momento de la aplicación.
  2. Efecto biológico progresivo: estimula la producción natural de colágeno, lo que mejora la firmeza y elasticidad de la piel a medio y largo plazo.

¿Qué zonas se pueden tratar?

Los hilos tensores son versátiles y se adaptan a diversas áreas del rostro y el cuello. Las indicaciones más comunes incluyen:

  • Elevación de cejas (efecto “foxy eyes”)
  • Elevación de la punta nasal
  • Marcación del ángulo mandibular
  • Reafirmación del cuello
  • Tersura del escote
  • Definición del contorno facial
  • Reposicionamiento de mejillas descendidas

Este tratamiento está especialmente indicado para personas que presentan flacidez leve o moderada, y que desean un lifting suave, sin cirugía ni cicatrices.

¿Qué tipo de hilos se utilizan?

Existen diferentes tipos de hilos, que se seleccionan según la zona a tratar y el objetivo estético:

  • Hilos espiculados: tienen pequeñas “espinas” o conos que se anclan en los tejidos para traccionarlos. Son los más indicados para efecto lifting.
  • Hilos lisos o monofilamento: se utilizan para mejorar la calidad de la piel, estimular colágeno y reafirmar zonas con flacidez difusa.
  • Hilos de sustentación y vectores combinados: permiten reposicionar tejidos de forma estratégica, con resultados muy naturales.

Todos ellos son reabsorbibles y su colocación es ambulatoria, sin necesidad de anestesia general ni hospitalización.

Duración de los efectos

El efecto inmediato de los hilos tensores es visible desde el primer momento. Sin embargo, su beneficio real se potencia con el paso de las semanas, a medida que el cuerpo genera nuevo colágeno en torno al hilo.

La duración media del tratamiento oscila entre 12 y 24 meses, aunque hay tipos de hilos y pacientes en los que el estímulo regenerador puede mantenerse hasta 4 años. Este efecto prolongado se debe a la bioestimulación tisular continua que generan los hilos antes de su completa reabsorción.

¿Cómo es el procedimiento?

  1. Valoración médica previa: se analizan las necesidades del paciente, la calidad de la piel y la dirección de la flacidez.
  2. Marcaje facial: se dibujan los vectores de tracción para asegurar una colocación simétrica y eficaz.
  3. Aplicación: se introducen los hilos mediante cánulas finas, con anestesia local en puntos clave.
  4. Resultado inmediato: tras la sesión se puede observar un efecto de elevación visible, que mejorará con los días.

La sesión dura entre 30 y 60 minutos y permite al paciente retomar su actividad habitual el mismo día o al día siguiente, sin necesidad de baja médica.

Ventajas de los hilos tensores

  • Lifting sin cirugía y sin cicatrices
  • Estimulación natural de colágeno
  • Resultados inmediatos y progresivos
  • Recuperación rápida
  • Procedimiento personalizado
  • Mejora de la firmeza, textura y elasticidad de la piel
  • Ideal para prevenir el descolgamiento futuro

Gracias a su versatilidad, los hilos tensores pueden combinarse con otros tratamientos como rellenos, neuromoduladores o radiofrecuencia para obtener un rejuvenecimiento facial integral.

¿Qué tipo de pacientes son candidatos ideales?

Este tratamiento está especialmente indicado en:

  • Pacientes entre 30 y 55 años con flacidez incipiente o moderada.
  • Personas que buscan una alternativa no quirúrgica al lifting.
  • Pacientes que ya se han realizado otros tratamientos estéticos y desean potenciar resultados.
  • Quienes desean mejorar el contorno facial y cervical de forma natural.

Los hilos tensores ofrecen una solución eficaz, segura y mínimamente invasiva para rejuvenecer el rostro y recuperar el soporte cutáneo perdido con el paso del tiempo. En la clínica de la Dra. Laura Bermejo, cada caso se evalúa de forma individual, aplicando la técnica más adecuada según el diagnóstico estético, la edad y los objetivos del paciente.

Foto de tratamiento de hilos tensores.

Preguntas frecuentes (FAQ)

¿Qué son los hilos tensores?

Son suturas finas, reabsorbibles y biocompatibles que se introducen bajo la piel para tensar y elevar los tejidos del rostro. Además de su efecto mecánico inmediato, estimulan la producción natural de colágeno, mejorando la firmeza y calidad de la piel a largo plazo.

¿Para qué zonas están indicados?

Los hilos tensores se utilizan habitualmente en:

  • Contorno mandibular.

  • Mejillas descendidas.

  • Cuello y escote.

  • Cejas (lifting de mirada o “foxy eyes”).

  • Punta nasal.

¿Qué tipo de flacidez corrigen?

Están indicados para flacidez leve o moderada, cuando aún no es necesario recurrir a una cirugía. Son ideales para pacientes que buscan un efecto lifting sutil y natural.

¿Qué resultados ofrecen?
  • Elevación inmediata de los tejidos.

  • Mejora progresiva de la firmeza por estimulación de colágeno.

  • Redefinición del óvalo facial.

  • Rejuvenecimiento general sin cambiar los rasgos.

¿Cuánto duran los efectos?

El efecto lifting es visible desde el primer momento y mejora durante las siguientes semanas. La duración media es de 12 a 24 meses, aunque el estímulo de colágeno puede mantenerse hasta 4 años en algunos casos.

¿El procedimiento es doloroso?

No. Se realiza con anestesia local en puntos estratégicos, lo que lo hace prácticamente indoloro.

¿Requiere tiempo de recuperación?

No se requiere baja médica. Puede haber una leve inflamación o sensibilidad, pero el paciente puede retomar su rutina habitual al día siguiente.

¿Se ven los hilos desde fuera?

No. Los hilos se colocan a nivel subcutáneo y son totalmente invisibles desde el exterior. La piel permanece intacta, sin marcas ni cicatrices.

¿Se pueden combinar con otros tratamientos?

Sí. Los hilos se pueden combinar con rellenos, neuromoduladores, Morpheus8 u otros procedimientos para potenciar el rejuvenecimiento y obtener un resultado más completo y duradero.

¿Quién es un buen candidato?
  • Personas entre 30 y 55 años.

  • Pacientes con flacidez incipiente.

  • Quienes buscan una alternativa no quirúrgica al lifting.

  • Pacientes que desean resultados visibles sin pasar por quirófano.